A escasos metros de la famosísima Alhambra, Granada nos guarda una de sus sorprendentes maravillas, un oasis natural con una historia deslumbrante. El Carmen de los Mártires es un jardín urbano que nos regala un paisaje de ensueño con su maravillosa vegetación y sus espectaculares vistas de la ciudad.
Se trata de una casona del s. XIX, rodeada de jardines de gran riqueza botánica, estatuas, grutas, cascadas, e incluso un lago, con una romántica torre y un puente.
Es un lugar ideal para pasear, desconectar e, incluso, para volver a sentirte como un niño alimentando a los patos y cisnes que lo habitan.
Si vienes a visitarnos con tus peques, mira los divertidos planes que puedes hacer en familia.
¿Por qué «Carmen de los mártires?
¿Te preguntas por qué se llama así? El Carmen de los mártires fue mazmorra, lugar de torturas, ermita, convento, huerto y palacio, a lo largo de los siglos.
En el siglo XI, como extensión del barrio de Alfareros, se creó en este lugar de la colina del Mauror un recinto donde celebrar justas y torneos militares.
Además, se almacenaban provisiones para la fortaleza que se empezaba a construir en la cercana colina de La Sabika, que después crecería hasta convertirse en lo que hoy conocemos como Alhambra.
La zona palaciega de la Alhambra estaba en construcción y sus obreros, cautivos cristianos, empezaron también a ser encarcelados aquí. Así que empezó a conocerse como «Campo de los Cautivos«. Las grandes mazmorras excavadas en la roca llegaron a albergar hasta 7000 prisioneros, muchos de los cuales murieron durante la toma de la ciudad hacia finales del siglo XV cuando los Reyes Católicos tomaron Granada.
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Homenaje a los mártires cristianos
Precisamente, el rey Boabdil, el último monarca nazarí, salió de la ciudad atravesando este campo, y en recuerdo de este hecho, la reina Isabel mandó construir una ermita aquí en memoria de los mártires que habían muerto, y ahí pasó a ser Carmen de los Mártires.
Posteriormente, en torno a 1573 se erigió el convento de los Carmelitas, del que fue prior San Juan de la Cruz. Además de escribir varios libros durante su presencia en el convento, plantó árboles y dedicó parte de su tiempo al cuidado del huerto y los jardines monacales.
El místico se sentaba a escribir a la sombra de un ciprés que puedes visitar siguiendo el camino tras el huerto monacal. Entre 1614 y 1620 se construyó una nueva iglesia para remplazar la ermita original. Todo el conjunto del convento fue destruido en 1842, aunque desde entonces se ha restaurado el jardín monacal .
La casa que podemos visitar actualmente fue construida a finales del s. XIX por Don Carlos Calderón quien compró el terreno como residencia de veraneo.
Fue reformada por un propietario subsiguiente, Hubert Meermans, que diseñó los jardines, creando distintos estilos de jardín francés, inglés o español, con fuentes, estatuas y grutas en distintos niveles.
Después de años de abandono, con la amenaza de la construcción de un hotel merodeando, han devuelto a la casa y sus jardines su antiguo esplendor y hoy es un espacio público municipal, para el deleite de granadinos y visitantes, donde se pueden realizar también bodas, celebraciones o diversos eventos.
Para llegar al Carmen de los Mártires, puedes ir a pie desde el Campo de Príncipe, detrás de la cruz, hacia el hotel Alhambra Palace, o desde la Plaza Nueva, a través del Arco de las Granada. Incluso se puede coger el microbús a la Alhambra desde Gran Vía, o el tren eléctrico desde Plaza Nueva.
La entrada es gratuita, y sus horarios son, de noviembre a marzo, de lunes a viernes de 10.00 a 14.00 horas y de 16.00 a 18.00 horas; sábados, domingos y festivos de 10.00 a 18.00 horas.
En veranos, de abril a octubre, el Carmen de los Mártires abre de lunes a sábado de 10.00 a 14.00 y de 18.00 a 20.00 horas; domingos y festivos: 10.00 a 20.00 horas. Durante el mes de agosto permanece cerrado.
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